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Los Términos Descriptivos en el Aprendizaje

Para aclarar, le llamo término descriptivo a aquellas palabras que tienen un significado inventado por algún autor o escuela. Por ejemplo el término “mecanismo de defensa” que usa Freud para describir cierto comportamiento de una persona ante un hecho desagradable, o el término

"Ancheta: objeto de tamaño manejable por la mano", o llámale "cosa" o de cualquier otra manera... mientras sepas qué cosa es.Son términos válidos la mayoría de las veces, pero también sucede que se abusa de ellos. Lo que he notado es que cuando un autor quiere darse importancia se inventa un término. Claro, hay autores que han inventado términos que en realidad describen algo nuevo en el conocimiento humano, y eso es totalmente válido, pero cuando se describe algo ya sabido pero con otras palabras, eso es chapuza.

El problema que yo veo con los términos es que son como los mapas. Dice una frase que “El mapa no es el territorio”. Quien conozca a la perfección el mapa de su ciudad no puede jactarse en verdad de conocer su ciudad. Hay que caminar en ella, olerla, escucharla, sentirla.

Conocer los términos y su significado te hace sacar 10 en los exámenes, pero no necesariamente te da conocimiento.

Un cuento de Anthony de Mello que describe esto va más o menos así (lo escribo de memoria):

Un peregrino se acercó a un discípulo del Maestro y le preguntó “¿Qué es la vida?”, el discípulo tomó su libro de notas y leyó las palabras del Maestro “La vida no es sino la expresión de la exuberancia de Dios”. Cuando el peregrino tuvo la oportunidad de entrevistarse con el Maestro, le preguntó “¿Qué es la vida?”, el Maestro le contestó “No lo sé”.

Una anécdota propia:

Cuando estudiaba psicología, tuve una clase de Administración, en ella vimos en un libro dos términos que el autor proponía para llamar a los tipos de necesidad de capacitación que una empresa puede tener, estos eran: Necesidad Oculta de Capacitación y Necesidad Evidente de Capacitación.

El autor explicaba que la necesidad evidente de capacitación era cuando se contrataba nuevo personal o se instalaba nueva maquinaria o se instituía un nuevo procedimiento. En esos tres casos la necesidad de una capacitación es evidente, porque está claro que si se contrata nuevo personal se tiene que capacitar, si se compra nueva maquinaria también hay que capacitar al personal actual en su uso o si se aplica un nuevo procedimiento también hay que capacitar al personal para que aprenda a seguirlo. ¿Está claro, no?

La Necesidad Oculta de Capacitación es cuando no ha ocurrido ningún cambio aparente, pero que al comparar la producción actual con, por ejemplo, la del año anterior, y vemos que ésta ha disminuido, entonces descubrimos que tenemos una necesidad de capacitación, y como esta necesidad no se veía a simple vista sino que tuvo que hacerse un análisis, pues se le llama oculta. ¿Lógico, no?

Pues no sé qué ocurrió, pero las compañeras Y LA MAESTRA entendieron que una necesidad es oculta cuando no sabes que la tienes y que cuando la descubres entonces ya es evidente, sea cual sea.

Es decir, todas las necesidades de capacitación de una empresa son ocultas, todas, hasta que se descubren, entonces son evidentes. ¿Qué sentido tiene crear un término que describe algo tan  obvio? Yo creo que ninguno. Lo que en un principio entendí yo me suena más lógico, pero no logré convencer ni a mis compañeras ni a la maestra de esto, por supuesto, ellas tampoco a mí.

En el examen, ¿quién tuvo la única respuesta equivocada? ¡YO! Por supuesto porque contesté lo que yo creía correcto, no lo que esperaban que contestara. Hay quien dirá que fui tonto al responder así, yo digo que fui consecuente… y pagué el costo.

Pero al final ¿qué importancia real tiene conocer estos términos? Ninguna.

Se debe estudiar para saber, no para sacar 10 en los exámenes.

Los términos que se enseñan son tan útiles como aquel conocimiento al que se refieren. Pero siempre será más importante el conocimiento que el término. Una rosa huele igual aunque se llame púrpura.

Lo importante es no perderse en los términos o desviar la atención con ellos. Como confesaba un señor “yo soy homosexual”, y le respondieron “¿Homosexual?, ¿tienes una gran cuenta de banco, una mansión, un súper carro de lujo? Porque si no ¡entonces no eres más que un pinche joto!

El término describe lo mismo, lo que importa es saber su significado.

Claro que es importante conocer los términos ya aceptados universalmente porque así nos hacemos entender mejor, pero forzar un término sólo para darle importancia al “descubrimiento” está de más.

En mercadotecnia me tocó ver también en un libro cuatro términos que describían los tipos de producto de una empresa, uno de ellos era “Vaca Sagrada”, se usa cuando el producto es el institucional o representativo de la empresa, otro era “Producto Estrella”, que es el producto que más le deja dinero a la empresa, el tercero era “Niño Problema” y era el producto que no se vendía fácilmente, el cuarto término lo he olvidado, tan importante era.

No he vuelto a encontrar estos términos en ninguna parte y no sé qué utilidad real y práctica tendría saberlos… además de poder contestar correctamente un examen. ¿Aprendimos algo con esos términos?, habrá quien diga que sí, que de todo se aprende, pero en realidad no, o cuando menos no algo muy útil.

Me tocó ver con amigo arquitecto una vez que en su casa estaban haciendo un pozo para una cisterna. Mi amigo, siendo estudiante de arquitectura, le dijo a su papá, quien también es arquitecto “ya casi está listo el pozo”, su papá le respondió en una mezcla de enojo y burla “¿Cuál pozo?, ahí no hay ningún pozo, es una excavación”.

Ese era el término correcto para ser usado por un arquitecto. Su papá tenía razón. ¿Qué diferencia hay entre un pozo y una excavación?, pues la misma que hay entre un buen arquitecto culto y uno inculto. En ese caso el término a usar dice mucho de la persona que lo usa, sobre todo si lo usa incorrectamente.

Pero ese término es parte del lenguaje de un arquitecto, no es nada inventado, es algo reconocido y usado por todos en la industria de la construcción, si eres parte de esa industria y no lo usas, tarde o temprano acabarás usándolo, de manera natural… con o sin ir a la escuela.

Mi recomendación para los profesores, y en general escuelas o autores, es que no abusen de los términos, no fuercen a los alumnos a aprender términos tontos, inviertan más su tiempo en darles verdadero conocimiento, si un término es necesario éste se aprenderá de manera natural.

Si hay un origen de todos los problemas en México ese es la educación, por eso me atrevo a hablar así y lo digo también por experiencia propia, aún en las "mejores" escuelas pasa esto. No diré el nombre de una en la que estuve sólo tres semestres, pero si no fuera porque tiene una gran biblioteca en donde pasaba cada momento libre que tenía, haber asistido ahí hubiera sido una gran pérdida de tiempo y dinero.