Júntate con los Viejitos
"Más sabe el Diablo por viejo, que por diablo", reza el dicho y dicen que los dichos de los viejitos son salmos chiquitos.
Los viejitos saben mucho, no por inteligentes, sino por sabios, por la cantidad de años que han vivido, pero me refiero a los viejitos de ahora, no a los de antes, porque antes una persona de 50 años era ya un viejito, ahora una de 50 años es realmente una persona joven. Al decir viejitos me refiero a personas de 75 años o más.
He escuchado decir a personas mayores (no viejitos) que el que era menso de joven sigue siendo menso de viejo y creo que es cierto, cuando menos hasta donde he podido comprobar personalmente, pero los años no pasan en balde, la experiencia y el conocimiento se van quedando y cada vez somos igual de mensos pero más sabios... o igual de listos y más sabios, depende el caso.
Como le decía un niño a su mamá "Mamá, ¿"idiota" se acentúa?" – "Con los años sí hijito" – responde la madre.
Además los viejitos por haber vivido tanto y tantas cosas ya saben lo que realmente importa en la vida y no se preocupan por las cosas sin importancia, aunque claro, lo han aprendido tarde, pero si eres listo tú podrás saberlo ahora mismo si se los preguntas.
¡Y hazles caso!, lo que te digan es muy probable que sea totalmente cierto, por más extraño que parezca.
Tú con tu título de profesional, tus maestrías o doctorados tienes muchos conocimientos, pero no es lo mismo que tener sabiduría. Un viejito que sólo hizo la primaria puede que no sepa ni enviar un correo electrónico (ni falta que le hace) pero sabe cómo disfrutar de la vida, sabe lo que hay que hacer y lo que no hay que hacer, probablemente él hizo lo que no debe de hacerse y por eso lo sabe ahora. ¿Por qué esperar a que la vida nos lo enseñe?
Lo importante de la vida no es acumular muchos bienes, ni tampoco muchos amigos, ¿quieres saber qué es lo que importa tener en la vida? Pregúntale a un viejito.
Dicen que le preguntaron a un viejito "¿Cuáles son las tres mejores cosas de la vida?", y el viejito respondió "Una copa de vino antes y un cigarrito después, esas son las tres mejores cosas de la vida", respondió con una sonrisa pícara en su rostro.
En otro escrito ya he dicho lo siguiente, pero cabe mencionarlo nuevamente aquí: le preguntaron a un viejito "¿Cómo puede llegar uno a ser viejito y mantener buena salud y buen ánimo?", y el viejito respondió "Pues mire, yo en mi caso lo que hago es que nunca discuto con nadie", "¿sólo eso?, no creo que se deba sólo a eso" – le replicaron – "Pues no ¿verdad?, no ha de ser por eso..", respondió alegremente el viejito.
Sé de un caso en el que una persona entró a trabajar en una empresa donde le prometieron que pronto viajaría a España junto con los directivos, estaba muy entusiasmada. Me contó todo sobre el trabajo y a mí también me pareció algo bueno y no dudé que pronto me regalaría un recuerdo de España, pero me platicó también que le contó de igual manera a su abuelo, un señor de 85 años, y éste le dijo que no se creyera eso, que ese tipo de negocios no prosperan, que no se emocionara tanto porque lo más seguro es que no fuera cierto lo del viaje.
¿Sabes qué ocurrió unos meses después?, la empresa siguió trabajando, pero el viaje no llegaba y un año después la empresa cerró. El abuelo tuvo razón. Hasta yo mismo me sorprendí cuando esta mujer me contó que la empresa había cerrado, pero tanto a ella como a mí nos quedó la experiencia.
Seguramente que hay asilos o casas de retiro en tu ciudad, te invito a que las visites. Llama antes de preferencia y ofrécete de voluntario para platicar o jugar con los residentes, estoy seguro de que te agradecerán tu tiempo. Lleva algún regalito, un pequeño dulce y dáselo al viejito con el que platiques. Hazle preguntas sobre la vida hace 50 años.
No todos querrán platicar contigo, no es que todos estén urgidos de charla, hay algunos que están perfectamente bien en su bendita soledad, igual que cuando eran jóvenes.
Al platicar con los viejitos te darás cuenta de que hoy vives tú mejor que ellos cuando tenían tu edad. Hoy tienes acceso a más información, a mejores prestaciones de salud.
¿Crees que la vida es injusta?, pregúntales cómo era antes. Créeme cuando te digo que hoy vivimos mucho mejor que como se vivía hace 50 años.
Antes había más pueblos y menos ciudades, hoy los pueblos han crecido y son ciudades, con todas las ventajas que éstas ofrecen. Pregúntales por la vida en los pueblos de antes.
¿Tienes miedo de hacer algo en tu vida?, cuéntale a un viejito y pregúntale si cree que deberías hacerlo, seguramente su respuesta te dará ánimo para hacer eso que temes, pero que seguramente es para tu beneficio.
Cuando yo era adolescente me daba vergüenza traer una espinilla en la cara, ahora creo que es una tontería tener vergüenza por algo así, es más, ahora de adulto me ha llegado a salir alguna que otra y no le doy ya la más mínima importancia. Y estoy hablando de una simple espinilla, ¿qué cosas habrá que ahora nos preocupan y que no deberían de importarnos?, cuando seamos viejos lo sabremos... o bien cuando se lo preguntemos a un viejito.